Bar Mi Pueblo. Última lección de tortillología.

El domingo pasado nos levantamos todos estos tortillandos con un pequeño nudo en el estómago, una mezcla de ilusión y tristeza. Alegría porque en unas horas se iba a cumplir nuestro objetivo y conseguiríamos completar con éxito y en tiempo todas las lecciones del curso de tortillología, y pena, porque llegaba el final de esta aventura, con la que tanto hemos disfrutado, hablando, comentando, ideando la cronología de las lecciones y haciendo las evaluaciones y crónicas de las mismas. Además esta última lección era en Olvera por lo que tenía un aliciente añadido, una excursión a la sierra, a un pueblo de nuestra provincia que muchos de nosotros aún no conocíamos.

El trayecto fue muy tranquilo, sin ningún incidente, y haciendo una paradita en Bornos para ir animando a nuestros estómagos, grandes protagonistas del día, a colaborar con la jornada.

Restaurante Mi Pueblo

Nada más llegar a Olvera, con mucha suerte aparcamos los coches justo delante del Restaurante Mi Pueblo, y digo coches, porque en esta lección repitieron como acompañantes nuestros, Censi y Juan Antonio, que ya nos ayudaran en su día con la lección del Volapié en Chipiona.

Tras reservar mesa en la terraza del restaurante decidimos explorar Olvera, nos sorprendió gratamente el aspecto del pueblo, sus calles, sus casas tan cuidadas. Al final de la calle Llana o Llana street enfilamos una cuesta - escalera hasta la plaza de la iglesia, desde donde se disfruta de unas vistas impresionantes del pueblo y los alrededores.

A las 14.00 horas estábamos llegando a nuestra mesa reservada, tras haber paseado por el mirador del Sagrado Corazón de Jesús, situado en la misma plaza del restaurante. Al poco de sentarnos se nos acercó Paco Medina para dar la bienvenida a estos tortillandos.

Pastel de tortilla

Tras pedir nuestra primera cerveza con tapa según el "Granada touch" del establecimiento, comenzamos a

ojear la carta de platos y de tapas, y sinceramente, con el hambre que teníamos se nos apetecía todo, fue difícil decidirnos, pero finalmente nuestra elección se decantó por supuesto por el pastel de tortilla (nuestra lección), un revuelto de Mi pueblo, el capricho patateril (una especie de ensaladilla), una ensalada de pimientos y turnodorcitos con salmorejo.

Ensalada de pimientos

La tortilla se diferencia de lo que es la tortilla de patatas tradicional, y está formada por varias capas de tortilla a la francesa y entre las capas tiene queso, jamón y pimientos. El resultado es una tortilla novedosa con una gran mezcla de sabores. Los tortillando le han dado a esta lección una valoración de 8,15 siendo el sabor, temperatura, punto de sal y presentación los aspectos más valorados.

Turnedorcitos con salmorejo

Durante la comida, y hay que ser honesto, el camarero obvió la beca, pero después de comer, tras recordárselo, nos permitieron cambiarla por una copita de licor de limón. Antes de irnos conversamos un rato con Paco Medina, comentándonos que él también es otro tortillando, lo cual vimos como muy interesante porque el participar le permite vivir la experiencia desde el otro punto de vista y enriquecerse con los conocimientos adquiridos al visitar los demás establecimientos. 

Tras intercambiar, durante una agradable conversación, nuestras vivencias en diversas lecciones tortillológicas nos despedimos de Paco, retornando a nuestros vehículos y emprendiendo el camino de vuelta a casa con una grata sensación, de esas que te hacen estar contento contigo mismo tras haber realizado un buen trabajo, por ello, nada más llegar a Cádiz nos fuimos al Unicornio para brindar por la tortillología y los nuevos licenciados. 

Los tortillandos con Paco Medina